Pilas Cofrade : Reportaje. Novena a Madre de Dios de Belén Coronada.

Desde el 30 de enero al 7 de febrero, la Hermandad de Belén celebró Solemne Novena Gloriosa a la Santísima Virgen en su Ermita. Para ello, la priostía levantó un precioso altar efímero en el presbiterio y ante el altar mayor que quedó cubierto en gran parte por colgaduras azules y rematadas por las bambalinas del palio de Carreritas.

El techo y la bambalina frontal del citado palio sustentado por dos varales hicieron las veces de dosel a Nuestra Señora de Belén que se nos presentó radiante para la celebración de sus cultos. Lució la imagen saya en terciopelo granate bordada en oro por el taller de Olmo en 1907, manto en terciopelo azul bordado en oro por la Escuela Taller de Bordado de Pilas en 2005, toca de sobremanto bordada en oro sobre malla por las hermanas de la Hermandad en 1984 y tocado de encajes dorados, que tan bien le sienta a la imagen. El Divino Infante lució traje a juego con el de la Madre y confeccionado en 1993.

También portó la Virgen el fajín de capitán general que le fuese impuesto en 1991, su tradicional ráfaga de 1700 o la corona de oro de la Coronación Canónica de Antonio Santos de 1996, amén de llevar la media luna a sus plantas o lucir distintas joyas de su ajuar.

Como indicamos anteriormente, el trabajo de la priostía vuelve a ser impecable, llenando de elegancia y majestuosidad los cultos a la Virgen. Para ello, se dispuso un plan de altar utilizándose los respiraderos del paso de palio, así como la peana del Jueves Santo donde se presentaba Nuestra Señora, a cuyos pies aparecía el querubín portando la vara de mando por ser Alcaldesa Perpetua de la Villa de Pilas. Un nutrido grupo de candeleros dieron luz al conjunto mientras que sendas jarras de flores de margaritas blancas sirvieron de exorno floral a este precioso altar.

Tanto el exterior como el interior de la Ermita de nuestra Patrona, también fue exornada con banderas y colgaduras, anunciando así días importantes para la Hermandad al celebrarse los cultos a la Santísima Virgen que, un año más, gozaron se caracterizaron por la gran asistencia de muchos pileños.